La piel refleja tu edad y tu salud. Muchas personas desean mantener su piel, especialmente la de la cara, con un aspecto sano y joven.
Existen muchos tratamientos específicos que te pueden ayudar, pero hay muchos gestos cotidianos que puedes llevar a cabo para conseguir que tu piel luzca como en su mejor momento.
Estos son algunos consejos para mantener la piel joven.
1. Hidrata tu piel
Mantener la piel hidratada es fundamental para un rostro luminoso y saludable.
Cuando hablamos de hidratación, muchas personas piensan automáticamente en lociones y cremas. Pero no debemos olvidar que la hidratación de la piel se produce, además, de dentro hacia afuera.
Por eso, beber mucha agua diariamente es tan importante para mantener la salud de la piel, aunque a menudo se pasa por alto. Si lo haces, tu piel notará la diferencia.
2. Protégela del sol
La protección solar diaria es esencial para prevenir las manchas provocadas por el sol y el cuarteamiento de la piel que se produce por la exposición excesiva al sol.
Aunque tomar el sol es muy saludable, ha de hacerse con moderación, ya que puede resecar y dañar la piel.
Prueba a aplicarte una crema hidratante diaria o maquillaje que contenga protector solar. Algunos productos combinan en un “todo en uno” el maquillaje, la hidratación y la protección solar.
3. Duerme bien
La falta de sueño provoca que la piel luzca envejecida y blanda, además de producir ojeras y bolsas que afean y envejecen nuestro rostro.
Pero no solo importa la cantidad de tiempo que duermes, sino el horario en que duermes. Algunos estudios señalan que el sueño es más reparador cuando nos acostamos a partir de las once de la noche que cuando lo hacemos de madrugada.
Así que, si puedes, acuéstate temprano y levántate temprano y tu piel te lo agradecerá.
4. Cuida tu piel antes de acostarte
El sueño es el momento en el que nuestro organismo se dedica a reparar y curar los daños que se producen en la piel durante el día.
El momento antes de acostarte es el mejor para realizar una cuidadosa limpieza de la piel y aplicar después una capa de crema hidratante.
5. Mantén a raya la ansiedad y el estrés
Muchos expertos advierten de los devastadores efectos de la preocupación, la ansiedad y el estrés sobre la piel facial.
Dedica un tiempo al día a relajarte. Puedes practicar algún deporte, meditar, darte un baño relajante o cualquier otra cosa que te ayude a desconectar de los problemas.
No lo dudes: el bienestar se reflejará en tu rostro.
6. Sigue una dieta sana
Los alimentos saludables son claves para mantener el aspecto joven de la piel. Come muchas frutas y verduras cada día y combínalos con proteínas de origen animal y con alimentos integrales.
Los granos enteros, las nueces y las semillas, y los pescados grasos puede ayudar a tu piel gracias a las grasas saludables y nutrientes que contienen.
Utiliza aceite de oliva para cocinar y para aliñar tus ensaladas.
Los suplementos de Omega 3 a base de aceite de pescado o de aceite de lino son ideales para añadir estas grasas saludables en tu dieta y te ayudarán a conseguir una piel más joven y fresca.