Si has leído algo de lo que se ha escrito por aquí anteriormente, puedes pensar que el título del post es una incoherencia total respecto a los contenidos del blog.
Solemos hablar de la constancia, de los pequeños pasos, del granito de esfuerzo diario, etc. (Si no te suena, ya estás en antecedentes.)
Pues no. No pienses que nos hemos pasado al bando de la indolencia vital. Tan sólo vamos a propiciar el equilibrio, que es cosa sana.
Y ahí vamos:
Ya hablamos de que esa actitud no era la mejor opción de todas.
Se puede producir más sin tanto esfuerzo, especialmente cuando hablamos de actividades que tienen que ver con la creatividad o el esfuerzo mental.
La creatividad no es muy amiga del agobio y del trabajo sin pausa.
Prueba de ello es que muchas buenas ideas acuden a ti mientras estás relajándote en la ducha o tomándote un café tranquilamente en una terraza.
Y en esos momentos de inspiración, creatividad, relajación (o llámalo como gustes) es cuando trabajamos mejor sin que tengamos la sensación de estar esforzándonos.
¿Quieres dejar de esforzarte tanto y producir buenos resultados? Pues, entonces…
- Refresca tu mente. Tómate breves respiros a lo largo del día.
- Si estás saturado, dedica un pequeño espacio a no hacer nada. (No es tan fácil.)
- Ve con más calma. Incluyendo aquí no sólo el trabajo, sino lo cotidiano de comer, asearte, vestirte, etc.
- Aprovecha el viento a favor. Hay días en los que uno está más «inspirado» y que el trabajo suple más. Qué mejor que sacarles partido.
Importa más tu salud que acabar carbonizado con tanto esfuerzo por buenos que esperes que sean los frutos. Y, en serio, con un poco de calma se obtienen iguales o mejores resultados (comprobado en primera persona).
Imagen de Jesse757
Vicky dice
Totalmente cierto. También pude comprobarlo en primera persona. De nada sirve esforzarte al máximo para acabar hech@ un asquito y poniendo en peligro tu salud… Hay que pensar ante todo en eso: la salud, de la que a veces nos acordamos una vez que se ha ido. Además, ¿cómo vamos a rendir en el trabajo, si enfermamos? A veces es bueno darse un respirillo e ir con calma.
Por otra parte, tampoco me ha parecido tan incoherente esta entrada… Me refiero a una incoherencia con respecto al resto de contenidos del blog. También hablas en él de huir del perfeccionismo, que puede llevarnos a situaciones de estrés nada recomendables y de terminar el trabajo con eficacia y eficiencia, es decir, echarle un vistazo a la calidad y anteponerla en ocasiones a la cantidad, algo que aplicado a este asunto se traduce en menos tiempo de trabajo, pero mejor invertido y aprovechado, sin estrés… 🙂
Tus Buenos Momentos dice
Oooohhh… Pero tú le encuentras coherencia a esta entrada porque sigues el blog desde que fue bautizado 😆 … cosa que te agradezco muchísimo.
Respecto al asunto del post, estoy segura de que la mucha gente (o la mayoría) está de acuerdo. Lo que pasa es que el sobreesfuerzo llega en ocasiones sin que nos lo hayamos planteado así al inicio: «O lo consigo o muero en el intento.
A veces son las presiones, las necesidades, el entorno, etc., los que van echándole carbón a la locomotora hasta que un día está la pobre que ni pa’ chatarra sirve. Yo he probado esta experiencia también. 😆 Por eso lo proclamo: Esforzarse hasta quedar hecho trizas no es buena idea.
Me alegro de que te guste la fotillo.
Vicky dice
Se me olvidaba! Qué cosa más bonita de foto!!!!!!!! <3