Despiertas en mitad de la noche. ¿Otra vez? ¡Qué mal! Son las cinco de la mañana y sólo falta un rato para que suene el despertador.
Ay, amigo… ¿Por qué has mirado el reloj?
¿Por qué lo hago yo también cuando me pasa… y trato de volverme a dormir contrariada?
La doctora Nerina Ramlakhan, especialista en cuestiones de sueño y estrés, nos deja unos cuantos consejos en su artículo del Huffington Post.

Y a mí me ha parecido muy útil su recomendación de evitar mirar el reloj durante la noche.
Para quienes tenemos el sueño ligero, es natural y frecuente mirar qué hora es y calcular cuánto tiempo nos queda para dormir. Sin embargo, esta costumbre hace que el ratito de sueño que nos queda no sea tan reparador.
Peor aún, es cuando caes en dicha costumbre, miras el reloj y te entra el agobio pensando que sólo tienes dos horas para dormir y no lo consigues.
La doctora nos sugiere reemplazar el pensamiento de: “¡Tengo que dormir, tengo que dormir!” por uno de más ayuda: “Voy a usar este tiempo para descansar”.
Ese sutil cambio puede disminuir la tensión y es más probable que podamos dormir (o algo parecido) hasta que suene el despertador.
En caso de que se te haya estropeado el sueño por el estrés, aquí te dejo un artículo con más ideas que espero que te sean útiles.
Imagen de Diego da Silva