Dormir ayuda a recordar lo aprendido

Esto les va a interesar a todas aquellas personas que estudian, ya sea por cuenta propia o bajo un programa académico formal.

¿Estudiar te da sueño? ¿No has podido evitar que tu castigada cabecita se posara en la mesa para dormir una siesta?

Veamos lo bueno de esas improvisadas siestecillas.

Dormir ayuda a recordar

La idea es ésta:

Dormir justo después de haber estado estudiando algo nuevo hace más fácil que lo recuerdes más tarde.

estudiante dormida

Sí, ya sabemos que dormir ayuda a la asimilación de lo aprendido y a su posterior recuerdo. Pero vamos a ver qué añade de nuevo este estudio.

La psicóloga Jessica Payne de la Universidad de Notre Dame y su equipo hicieron pruebas con 207 estudiantes, que habitualmente dormían unas seis horas por noche.

Les dieron a estudiar pares de palabras, con o sin relación entre ellas. A unos se las dieron por la mañana y a otros, poco antes de irse a dormir.

Evaluaron lo que recordaban 12 horas después y comprobaron que los que habían dormido en ese tiempo recordaban más palabras que aquéllos que habían estado despiertos todo el día.

Lo novedoso del asunto es que apenas había diferencia en el recuerdo de pares de palabras relacionadas semánticamente, pero sí en las que no tenían relación. Los que durmieron después de estudiar recordaban más de éstas.

Volvieron a hacer la prueba a las 24 horas sin que se les desmontara la hipótesis: dormir justo después de estudiar es beneficioso para la memoria declarativa (ya se estudien palabras relacionadas o que no guarden relación).

La memoria declarativa, precisamente, es la que necesitan tener en forma quienes empollan frente a la mesa, tratando de procesar y asimilar palabras, hechos, conceptos, etc.

¿Te animas a probarlo? Después de una sesión de estudio, reposa la información con un buen sueño. 🙂

Fuente: Learning Best When You Rest. Science Daily.

Imagen de umjanedoan


Categoría: