Hay momentos duros y circunstancias dolorosas y adversas que nos ponen difícil el hecho de seguir adelante con nuestras responsabilidades.
Algunas personas tienen la suerte de poder «retirarse» durante ese tiempo difícil y volver a la carga cuando están restablecidas, pero no siempre es así.
A veces hay que hacer de tripas corazón; levantarse y atender nuestras ineludibles obligaciones. Pero, claro, no es fácil.
¿Y qué se puede hacer cuando hay que seguir caminando sin ganas ni fuerzas?
En Pick the Brain nos dejan algunos consejos para mantenerse en pie en esos malos momentos:
1. Aceptar la situación. Así, tal cual, sin forzarse a mantener la alta productividad de otros días. El estrés de querer y no poder mantener el mismo ritmo supone un desgaste de energía, siendo ésta tan necesaria en un mal momento.
2. Evadirse lo menos posible, quizás bebiendo alcohol, durmiendo como un oso o dándose atracones de comida basura para aplacar la ansiedad. Esos «parches» sólo dan un respiro temporal. Después se vuelve al mismo punto.
3. Apoyarse en personas de confianza. El mejor recurso para salir adelante en una situación adversa es rodearse de la gente adecuada: amigos, familiares, conocidos o profesionales. Esa red de apoyos (por pequeña que sea) es fundamental para mantenerse fuerte.
4. Cuidarse. Tan básico y fundamental como dormir bien, alimentarse equilibradamente y hacer algo de ejercicio. Es difícil mantener unas costumbres saludables cuando los problemas quitan el sueño, el apetito y las ganas de todo. Sin embargo, hay que hacer el esfuerzo de mantener la salud.
Precisamente, nos quedamos con estas dos recomendaciones de oro:
- Cuidarse lo mejor posible, aun en las circunstancias más adversas.
- Luchar juntos, apoyándonos y dejándonos apoyar por otros.
Y, por si te sabe a poco, aquí tienes más ideas para salir adelante en esos momentos críticos.
¡A resistir! Ya pasarán los nubarrones. 😉
Imagen de R.O Mania
Comentarios
2 respuestas a «Ser productivo en un momento difícil»
El ser humano aprende más de los momentos difíciles, nos ponen a prueba y agudizan nuestro ingenio para solucionar las cosas. Cuando estás metido en el pozo no ves la salida pero con un empujoncito todo puede cambiar. Me remito a una frase: «Cuando la vida te presente mil razones para llorar, demuéstrale que tienes mil y una razones por las cuales sonreír».
Y piensa que al final todos acabaremos en el mismo sitio y que lo que ahora te puede parecer un problema si cambias tu forma de ver las cosas quizá se convierta en una oportunidad 🙂
Un besito
Qué bonita invitación para no perder la esperanza y seguir adelante. 🙂
Muchas gracias, Alba.
Besos!!!