¿Has visto o leído alguna vez el discurso motivacional de un cabecilla delante de una tropa alicaída? Me refiero a ese tipo de discurso apasionado y dramático, que dispara la motivación como una catapulta.
Pues ese es el cometido de este post, que seguro que se queda lejos del poderío épico de Braveheart, Gladiator o los famosos 300. Pero eso es porque, entre las arengas que vas a leer, faltan las tuyas.
Date razones
Pueden encontrarse razones para plantarle cara a la vida y seguir adelante, aun cuando pesen el temor y el cansancio.
Aquí tienes más de 30 escritas en unos minutos. ¿Cuántas serían si se sumaran a las tuyas?
Serían demasiadas como para ignorarlas. Demasiadas como para no levantarte hoy con la determinación que necesitas.
¿Qué te parece si las compartimos?
Razones para seguir luchando
¿Por qué luchar?
- Porque la vida es un reto tras otro.
- Porque tú marcas el rumbo de tu vida.
- Porque tu corazón sigue latiendo.
- Porque escuchas lo que él te dice.
- Porque has luchado mucho hasta llegar aquí.
- Porque estás preparado para seguir haciéndolo.
- Porque para bajar los brazos ya habrá tiempo.
- Porque el motivo vale la pena.
- Porque hay que huir de la prisión del miedo: Es hora de volar.
- Porque, si no puedes volar, puedes caminar. Y, si no puedes caminar, llegarás a rastras. Pero llegarás.
- Porque vas a avanzar.
- Porque tienes derecho a hacerlo.
- Porque te lo mereces.
- Porque cada problema tiene una solución. Si no, no es un problema.
- Porque ansías encontrar soluciones.
- Porque tienes imaginación, sabiduría y paciencia para hacerlo.
- Porque el dolor de los errores se ha convertido en experiencia.
- Porque sabes lo que quieres y lo que NO quieres.
- Porque ya has elegido.
- Porque tu sueño es muy grande como para que las mentes pequeñas lo reduzcan.
- Porque has dicho “NO” a límites absurdos.
- Porque siempre habrá alguien a quien no le guste lo que hagas, pero ya lo has asumido.
- Porque el odio, la ignorancia y la negatividad de otros no te detendrán.
- Porque quien dice que es imposible expresa su opinión. No un hecho.
- Porque eres único, ¡irrepetible!
- Porque este es el momento de cambiar el curso de tu vida.
- Porque es hora de actuar y de que hablen las acciones.
- Porque en cada amanecer llegan nuevas oportunidades.
- Porque el pasado quedó atrás.
- Porque la puerta hacia el futuro se abre hoy.
- Porque la fuerza de la fe está contigo.
- Porque el amor es tu combustible.
- Porque tienes esperanza en los bolsillos.
- Porque, aunque el mundo no crea en ti, tú sí lo haces.
Porque tropezarás, te caerás, te equivocarás, sudarás, llorarás, vencerás mil tentaciones, encajarás golpes y quizás grites de dolor antes de llegar al final.
Pero lo harás sin haber perdido el valor y sin haber faltado a la promesa que te hiciste. Pase lo que pase, habrá valido la pena.
– Lista publicada en TBM en 2012 y entrada actualizada en 2018. –
Date buenas razones para continuar: LAS TUYAS
¿Tienes buenas y sólidas razones para hacer lo que haces? Súmalas y agárrate a ellas. Te ayudarán a abrirte paso hacia delante.
Cuando tienes buenas razones o, al menos, una razón poderosa, es más difícil que una excusa o una distracción te saquen del camino.
Es más difícil que sucumbas a las dudas o que pierdas mucho tiempo lamentándote. Es más difícil que dependas por completo de los demás para motivarte.
Tú tienes razones o, al menos, una buena razón para continuar
Date esa razón, entonces. Y, si no la encuentras en lo que estás haciendo, considera otras opciones, un camino distinto en el que sí halles una gran razón para recorrerlo.
Porque, cuando tú sabes cuál es la recompensa y esa recompensa es algo que deseas con toda tu alma, nada puede detenerte.
Halla esa razón. Sé consciente de la recompensa. Ten un propósito. Y te moverás hacia delante, venciendo cada obstáculo; dando cada día los pequeños pasos que te acerquen a ella.
Lo que más fuerza puede darte es eso: Una buena razón. ¿La tienes?
Pues ¡agárrate a ella!
A no ser que tengas muy claro cuándo, porqué y cómo retirarte, sigue luchando.
Sigue, aunque la victoria te parezca imposible. Hazlo por ti.
Recompensa más terminar la lucha con algunas heridas, que salir ileso sin darse la oportunidad de llegar al final. Es mucho lo que se crece, mucho lo que se aprende.
Imagen de mgjefferies
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