Falta poco para empezar un nuevo año. Ya sabes eso que se dice: «Año nuevo, vida nueva.»
Muchos de nosotros, con esa ilusión que dan los comienzos, nos hemos hecho alguna vez buenos propósitos pensando en el 1 de enero.
Lo suyo es que sean pocos propósitos y asequibles.
Desde luego, que hagamos un plan, aunque sea mínimo, para maximizar las probabilidades de lograrlos. Y, algo también importante: Que sean genuinamente nuestros.
Si quieres sacarte el carnet de conducir, perder peso o aprender a bailar la danza de los siete velos, perfecto, pero hazlo por ti, para ti.
Deja de marcarte propósitos con el único motivo de darle gusto a tu familia, a tu pareja, a tus amigos o al jefe.
Primero, porque te será más fácil lograr algo que deseas y por lo que estás intrínsecamente motivado. Luego, porque cada uno tiene su propia vida para plantearse los propósitos que crea oportunos.
Un propósito es una meta que enriquecerá nuestra vida; no es una presión por complacer a otro.
Así es que, si te proponen o sugieren que pierdas unos kilitos, que renueves tu fondo de armario, que aprendas esto o aquello o que te mudes a El Cairo, hazlo sólo si deseas hacerlo por ti.
Ésa es la propuesta de hoy: Que tu propósito sea realmente tu propósito.
Ánimo y buena suerte, si te planteas alguno.
Imagen de moneboh
Comentarios
3 respuestas a «Que tus propósitos sean sólo tuyos»
El año pasado un amigo mío en los propósitos puso: «Ir más de viaje con mis amigos» y yo le contesté, los propósitos tienen que ser algo que puedas conseguir sin la interferencia de los demás, así que esta entrada me la sé muy bien, jejeje :).
Un besazo
Qué buen ejemplo! Efectivamente, los propósitos han de depender de uno mismo y no de la voluntad o el comportamiento de los demás. 🙂
Gracias, Alba. Muchos besos!