Opciones poco convencionales para desconectar y relajarse

Es beneficioso para nosotros contar con la mayor cantidad de opciones para elegir alguna de ellas en esos momentos en las que tanto necesitamos darle un puntapié al estrés.

O, simplemente, para aportar una dosis extra de bienestar a nuestro día.

Hoy apuntamos algunas opciones poco usuales, pero que también cumplen su propósito. Puede que ninguna te sirva, pero puede que sí.

Veamos…

desconectar y relajarse

  1. Un masaje en las orejas. Es más popular el masaje en los pies (reflexoterapia), por la cantidad de terminaciones nerviosas que se concentran en la zona. Pues con las orejas pasa lo mismo. Hay terminaciones nerviosas en la zona que estimulan otras partes del organismo. Podrías probarlo.
  2. Pintar sin brocha. Si el arte te corre por las venas, es una opción más para expandir tu creatividad; si no es así, una actividad de «marraneo» que puede devolverte a la infancia durante un rato.
  3. Tirar trastos. Qué relajante es liberarse de lo que uno sabe que no va a necesitar más… ¡Saca de tu vida lo que no sirva!
  4. Risoterapia. Esta opción es clásica; no tiene nada de alternativo. Pero… ¿y si te digo que han diseñado cursos como «el yoga de la risa» (laughing yoga)? Se trata de la unión perfecta del yoga y la risoterapia. Si necesitas más información, es fácil encontrarla en Google.
  5. Procrastinación consciente. Haz una lista de cosas que tengas que hacer y después la ignoras totalmente para ponerte a hacer algo que sí te apetezca. Hay que ser cuidadoso con esta opción, pero ahí está…
  6. Honestidad bruta. Deja que tu cerebro descanse y no inventes excusas para librarte de compromisos sociales. ¿Alguien intenta convencerte una y otra vez de que hagas algo? Pues deja de preguntarte cómo se sentirá con tus respuestas o si quedas bien o mal. Simplemente, di: «No quiero» (y punto).
  7. Bailar bajo la lluvia. Un poquito. Tampoco hace falta que emules a Gene Kelly.
  8. Diviértete en tu entorno de siempre. Si no puedes viajar a otro lugar o no te apetece, baraja las opciones de ocio que hay alrededor. Puede haber algunas extrañísimas que te encanten.

Ojalá que encuentres útil alguna de estas opciones. Si no, seguiremos investigando. 😉


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