¿Tienes un problema y te gustaría contar con el apoyo de otro ser humano? ¿Alguien que te escuche, que te oriente, que te abrace…?
¿Y qué pasa si, por las circunstancias que sean, no puedes hablarlo con nadie?
El calor humano es insustituible y también la oportunidad de tener a alguien que te ayude a analizar el problema (dos cabezas, mejor que una).
Pero, si no hay nadie alrededor y necesitas clarificar tu pensamiento, tienes una opción más efectiva que darle vueltas al problema en tu mente hasta que te dé jaqueca: háblalo con un objeto.
¡Eh! Que no es broma ni tampoco un consejo insalubre. La cosa funciona.
El simple hecho de hablar en voz alta sobre eso que te preocupa hace que lo veas de otro modo, pero es mucho más efectivo cuando se lo cuentas a alguien y, más todavía, si ese alguien no tiene ni idea del problema.
¿Por qué? Porque, seguramente, lo cuentas de una manera ordenada y lo más clara posible (para que tu interlocutor te entienda).
No estás pensando en el asunto y en sus posibles soluciones a la vez: Te centras sólo en el meollo.
Esto, tan simple y tan sencillo, puede ayudarte a clarificar y resolver un problema.
Pues, cuando no hay confidentes o consejeros humanos, en Litemind nos proponen contárselo a nuestro patito de goma. ¿Por qué no?
- El pato no te va a interrumpir mientras hablas.
- No te va a poner excusas para no escucharte.
- No te juzgará.
- No se sentirá molesto o preocupado por lo que le cuentes.
- Y, por supuesto, no irá corriendo a contárselo a otros patos.
Pensándolo bien, hay veces en las que contárselo al pato de goma es más ventajoso que hablarlo con una persona, ¿o no?
Bromas aparte, yo he probado este consejo, no con un pato u otro objeto, pero sí hablando como si estuviese contándole el problema a alguien. ¡Y sí sirve!
A veces me ha servido para desahogarme; otras, para ordenar ideas; otras tantas, para considerar opciones que, con todo el jaleo mental, no se me habían ocurrido antes…
¿Tú lo has probado? Podrías hacerlo alguna vez y, si ves que no te es útil, pues intentas otra cosa y ya está. Seguiremos explorando opciones, para que no falten. 😉
Imagen de Por Jon Wiley