¿Conoces los grandes beneficios de jugar para la salud de los adultos?
Aquí tienes 6 razones de peso para jugar más. Y, si después de leer esto te entran unas ganas locas de jugar, al final te dejo ideas para hacerlo sin excusas que valgan.
Beneficios de jugar para los adultos

Partamos de que jugar es una actividad que guarda una relación estrechísima con el bienestar y la felicidad. Olvídate de quien te dice que es una pérdida de tiempo o una ocupación de vagos.
Si dejas de cumplir con tus obligaciones para ponerte a jugar, la cosa es distinta. Y también lo es cuando el juego es una adicción para ti. Ahí tiene poco de beneficioso.
Dejemos esos casos a un lado.
En esta entrada hablamos de los ratos de juego que, por el bien de nuestra salud, es interesante que estén presentes en la adultez y no solo en la infancia.
¿Por qué?
Aquí tienes 6 beneficios del juego para todas las edades. (A ver si los adultos que han dejado de jugar se animan a retomarlo.)
1. Jugar te ayuda a ser más creativo

Con el juego liberas tensiones y eso facilita las conexiones neuronales, lo que resulta en una mayor creatividad y flexibilidad mental.
Por ejemplo, estudios han demostrado que juegos como el Tetris pueden mejorar la memoria visual y la capacidad de resolución de problemas
Las investigaciones dicen que, cuando mejor te sientes, más hábil eres enfrentando problemas y situaciones complicadas. Y al revés también se cumple: Realizando una actividad creativa te sientes bien.
¿Cómo comenzar a trazar este círculo virtuoso? Jugando un poquito más.
2. Jugar previene el deterioro cognitivo

Incorporar actividades lúdicas en la rutina diaria puede tener un impacto positivo en la función cognitiva.
Tanto los juegos mentales como los físicos, estimulan diversas áreas del cerebro, mejorando habilidades como la memoria, la atención y la capacidad para resolver problemas.
Y los beneficios para los adultos van más allá, considerando que estas actividades ayudan a prevenir el deterioro cognitivo que va asociado a cumplir años.
3. Jugar amplía tu perspectiva

Cuando juegas eres más flexible y estás más dispuesto a adoptar puntos de vista diferentes para resolver una situación.
El juego nos sirve para explorar un amplio abanico de opciones y esto supone un entrenamiento valiosísimo, que repercute en otras áreas de la vida.
4. Jugar fortalece tu salud: El juego es un gran recurso anti-estrés
El juego desestresa. ¿Cómo?
Juegos mentales

Relajan, porque exigen desconectar de los problemas cotidianos.
Además, unos minutos de ejercicio para nuestro cerebro, de gimnasia mental, sirven para estimular habilidades cognitivas, como la concentración y la memoria.
Eso, sin que suponga un esfuerzo tortuoso, al estar pasando un rato agradable.
¿Cómo te quedas si te digo que los videojuegos pueden…
contribuir al bienestar mental, reduciendo la angustia psicológica y mejorando la satisfacción con la vida.
Pues, sí. En El País se hacen eco de un estudio reciente publicado en Japón con estos hallazgos.
Juegos físicos

Tienen todos los beneficios del ejercicio físico, a los que se añaden el aspecto lúdico y de sociabilidad, en el caso de jugar con alguien.
Además, el deporte y el movimiento en juegos físicos activan áreas del cerebro clave para prevenir el envejecimiento prematuro. El ejercicio diario mejora el estado de las células cerebrales. (AS)
Por otra parte, el juego requiere que pongas tu cuerpo en movimiento. Y, aunque eso suponga un esfuerzo, este va en sentido contrario a las sensaciones negativas que provoca el estrés.
Ese esfuerzo físico, aunque suene contradictorio, supone un descanso.
5. Jugar sirve para conectar con el momento presente

¿Te acuerdas de cuando hablamos de cómo centrarse en el momento presente?
Pues eso lo puedes conseguir con facilidad gracias al juego.
El juego es tan divertido y placentero que no cuesta nada sumergirse en el momento, vivirlo con los cinco sentidos puestos en él.
Esto es serio, porque, según las investigaciones al respecto, se estima que muchos de nosotros pasamos buena parte del tiempo con la mente vagando de una cosa en otra. Y, además, estas nos dicen que: Una mente errante es una mente infeliz.
El juego es útil para centrarte y concentrarte, mejorando con la práctica esta habilidad. Pero, por lo pronto, obtienes la ganancia de ser plenamente feliz en este momento.
6. Jugar te ayuda a conectar con otras personas

Compartir un buen rato de juego con alguien amplifica la felicidad, además de ser un recurso eficaz para derribar barreras invisibles que hay entre nosotros. El juego nos acerca.
¿Recuerdas lo fácil que era hacer amigos de niño gracias a los juegos? De adultos se complica lo que antes era tan natural…
Una actividad recreativa te ayuda, tanto a hacer nuevas amistades como a conectar con quienes ya conoces. Así solo pases la tarde jugando al parchís.
Qué gusto da divertirte y, además, saber que estás potenciando con ello tu bienestar físico y mental, tu creatividad y tus relaciones personales.
Para redondear y por si te hacen falta, aquí tienes:
Ideas para jugar un poquito más

1. Hazte un buen repertorio. Selecciona actividades que te gusten y trata de que haya variedad. No vale que te quedes con una, como los videojuegos, y lo único que varíe sea que cada vez eliges un videojuego diferente.
Ejemplo: fútbol, ajedrez, videojuegos y construir maquetas. Son solo cuatro actividades, dichas al tuntún, pero variadas. A eso me refiero (de interiores, de exteriores, para practicarlas solo y/o en compañía).
2. Hazle sitio al juego. Elige unos huecos en tu agenda, aunque sean chiquititos y cítate con estas actividades. Las cosas que con mayor probabilidad se hacen son las que tienen día y hora para hacerse.
3. Sumérgete en la actividad. Cuando llegue tu hora de jugar, piérdete en esa actividad, como cuando eras niño. Olvídate de todo lo demás por un rato.
Conclusión

Jugar no es solo cosa de niños. Necesitamos mantener ese hábito en la edad adulta, por lo beneficioso que es, tanto para el cuerpo como para la mente.
No dejes que la rutina y las responsabilidades te priven del placer de jugar. Hazle un hueco en tu vida y disfruta de sus beneficios mientras sigues sumando años, sin que tu vitalidad se resienta.
Súmate a los muchos adultos que no nos hemos olvidado de lo sano que es jugar mientras se está vivo.