Se acercan esos días tan especiales del año. Unos celebran la Navidad; otros el equinoccio de invierno, mientras a todos nos rodean luces, comida, regalos, música y jolgorio.
Son días divertidos, pero con su puntito de estrés. (Por cierto, ya recopilamos algunas ideas para combatirlo en estas fechas.)
Hoy vamos a compartir propósitos esenciales para sacar lo mejor de esta temporada, manteniendo el equilibrio emocional y disfrutando lo que se pueda.
Aquí va mi lista de ideas-propósitos:
1. Reír todo cuanto sea posible
Tal y como está el patio, la risa es el mejor regalo que nos podemos hacer. Por mi parte, aprovecharé las oportunidades que se presenten para practicar este ejercicio saludable.
2. Descansar, sobre todo mentalmente
Estos días festivos se pueden emplear para aparcar problemas y preocupaciones, temporal o indefinidamente. Es cuestión de proponérselo y dejarse llevar por el ambiente.
3. Conectar con «el niño interior»
Dicen que son los niños quienes más disfrutan de estas fiestas. Yo me quedaría con uno de los elementos que hacen que esto sea así: la ilusión.
Aunque sea por pequeños detalles, me gustaría poder sentir esa ilusión, por ejemplo, viendo las decoraciones festivas, jugando un poco más, aguardando con esperanza el año nuevo, etc.
4. Dedicar más tiempo a la gente importante
Entiéndase por «gente importante» ese grupo grande o pequeño de seres que son un tesoro en nuestra vida.
Estos días son una ocasión más para celebrar esa circunstancia y los sentimientos que nos unen.
Es verdad que también hay soledad y algunas ausencias dolorosas. No todo son luces y alegrías. (Vaya un abrazo para quienes sienten la pérdida.)
5. Escabullirse de la gente negativa
En las reuniones clásicas de esta fecha también podemos encontrarnos con esas personas que nos hacen sentir mal.
No sé tú, pero yo pasaré el menor tiempo posible a su lado.
6. Tirar el perfeccionismo a la basura
Las navidades llegan cargadas de acontecimientos, cambios de ritmo y excesos varios.
Hay que ser tolerante al cambio de estos días. Yo soy la primera en esbozar la nota mental: «¿Un poquito de caos? No pasa nada.»
7. Evitar excesos gastronómicos
Es mi propósito, que conste. Ni atiborrarme, ni emborracharme hasta vomitar, porque no lo encuentro divertido.
Eso sí, un poquito de disfrute extra para el paladar… que sea bienvenido. 😀
Si quieres, puedes añadir tus propuestas o propósitos saludables. Así tendremos más opciones para lograr nuestro objetivo esencial: disfrutar cuanto sea posible de estos días.
Imagen de Grant MacDonald
Alba dice
Yo me propongo hacer algo bueno por alguien todos los días.
Despertarme un poco más temprano para disfrutar de los amaneceres :).
Descargar la mochila de los malos pensamiento o compañías para dejar espacio para el año que viene.
Y finalmente agradecer al 2011 que haya sido el mejor año de mi vida :).
Un besito
TBM - Casandra dice
Tus propósitos son estupendos. 🙂 Coincidimos en el de aparcar la negrura todo lo posible, ja, ja… Gracias por compartirlos.
Besos!!!